13/12/09

Debates indecentes

"En 1953 las empresas tabacaleras publicaron en todos los periódicos estadounidenses una página titulada "Nuestra franca declaración a los fumadores de cigarrillos". Los mensajes del persuasivo texto eran que fumar no daña la salud y que esta afirmación tenía bases científicas. El director científico del Comité de Investigaciones de la Industria del Tabaco (CIIT) escribió en 1957 que "el problema de la causalidad de cualquier tipo de cáncer es complejo y difícil de analizar... A pesar de toda la atención puesta en la acusación de que fumar produce cáncer de pulmón, nadie ha establecido que el humo del cigarrillo o alguna de sus componentes cause cáncer en el hombre".

La estrategia central del CIIT era financiar a científicos que pusieran el énfasis en la diversidad de factores que pueden causar el cáncer y evitar que se le asignara al tabaco la importancia que en realidad tenía. La idea era crear confusión, escepticismo, controversia y "un sano debate científico". Y lo lograron. Los periodistas, siempre ávidos de controversias y obligados a recoger equilibradamente puntos de vista divergentes, le daban a ambas partes igual espacio y respeto.

El problema con esto es que, ya en 1950, existía evidencia incontrovertible que vinculaba el fumar con el cáncer del pulmón. Tuvieron que pasar varias décadas para que la deshonestidad de las empresas tabacaleras y sus científicos a sueldo fueran desenmascarados, y el vínculo entre tabaco y cáncer dejase de ser controvertido.

Medio siglo después estamos en lo mismo. Pero....." (leer más)

No hay comentarios: